En la consulta, todo mi afán es tratar de llevar de la mano al paciente hasta que alcance un equilibrio, en todos los aspectos que alberga el ser humano:
- En el físico (estructural, fascial, óseo, ligamentoso, de rango visual, de apoyos plantares, de movimientos simétricos, en la propiocepción…).
- En el químico (carencias nutricionales, de oligoelementos, vitaminas, aminoácidos…, intolerancias, alergias, alteraciones hormonales, enzimáticas o de neurotransmisores, intoxicaciones por medicación, por radiaciones, u otros…).
- En el aspecto emocional (conflictos biológicos, emociones atrapadas, operadores modales «sellados», hologramas, sensaciones vitales instauradas, anclajes, miedos…).
- y en el energético (alteraciones de ph, meridianos, puntos de acupuntura, chakras en bloqueo o con problemas de comunicación…).
Y tras todo esto (que no es poco!!!!) o, paralelamente, siempre he pensado en rodearme de profesionales (yo no llego sola a todo lo que quisieraa!) que pudieran ofrecer vías para un mantenimiento de ese equilibrio de mentes y cuerpos tras el «alta» en la consulta. La búsqueda ha sido larga y con muchos gratos encuentros por el camino: Antigimnasia, Técnica Alexander, RPG, ejercicios terapéuticos, yoga, Qigon…
Hoy, y desde diciembre del 2016, se me brinda la oportunidad de trabajar codo con codo, con Beatriz López Sañudo, compañera fisioterapeuta, que trae en su mochila una perfecta herramienta para ese objetivo, y que se ha registrado con el nombre de «Flow Motion».
La práctica del Flow Motion, nos DEVUELVE el modo de movernos en la vida más eficiente, en todas las acciones, habilidades, juegos y búsquedas. Subrayo «devuelve», porque en nuestros primeros años de vida, hasta alrededor de los tres años, nuestros movimientos eran perfectos, «baratos» (en cuanto a gasto de energía), eficaces, armoniosos, seguros, implacables. Luego… con el ir adaptándose a esta vida llena de incoherencias y con el cumplir años, empezamos a enfrentarnos al mundo, con miedos, que se traducen, en muchos aspectos, y también en la forma física, en la forma en cómo nos movemos, cómo nos situamos ante la fuerza de la gravedad y en cómo reposamos.
Encantada estoy de que se cumplan mis deseos de equipo con profesionales tan cualificadxs y punterxs… Gracias, Bea, por apostar en la vida por lo que nos ayuda a ser más libres a todxs…
Estas son nuestras manos… Gran equipo, verdad? (foto de Luis Piñero Baena).
Para lxs que quieran visualizar un ejemplo del tipo de trabajo que hace Beatriz en la sala diáfana de la consulta, os copio aquí un enlace: https://www.youtube.com/watch?v=fe2BmnkgX_M.
Espero lo disfrutenn!
